Con una bolsa de plástico tradicional está muy claro que las heces de perro van al contendor de residuos (gris). Pero si recogemos los excrementos con una bolsa biodegradable ¿Se puede desechar en el orgánico?
La respuesta es ¡NO!
Con una bolsa biodegradable se tienen que depositar los excrementos en el mismo contenedor que las bolsas de plástico, el contenedor de color gris, de los residuos.
Entonces ¿Qué diferencia hay entre comprar una bolsa de plástico y una bolsa biodegradable?
La respuesta es muy sencilla. Cuando la bolsa es de plástico, el excremento de perro se descompone pasado un tiempo, pero la bolsa puede permanecer más de 150 años. Pero si utilizamos una bolsa biodegradable, los dos residuos se descompondrán en poco tiempo, además el excremento facilita la descomposición de la bolsa, de modo que acelerara el proceso.
¿Por qué se depositan en el mismo contenedor?
Los excrementos de los perros contienen parásitos y bacterias como la “Toxocara” canis o la “Ancylostoma”. Estos son dos parásitos que habitan el intestino de los caninos y que, en determinadas condiciones, pueden transmitirse a los seres humanos y ocasionar enfermedades. Además los excrementos de perros no pueden ser utilizados como abono, ya que el alimento que consume cada animal es lo que marca la diferencia entre sus excrementos. Los perros son animales básicamente carnívoros, cuyas heces portan ciertos microorganismos que las alejan de ser abono para el campo o las plantas.
Por este motivo tienen que depositarse en el contenedor de los residuos.
Hagamos que esta sea la única huella que dejen.
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